sábado, 25 de octubre de 2008

Reflexiones de Padre Rico Padre Pobre

Padre Rico Padre Pobre es un libro del autor Robert Kiyosaki y trata de una forma amena de encontrar cada uno de nosotros una vía que nos permita controlar nuestro propio destino financiero.

La cierto que es un libro de sobras conocido así es que tan solo comentar dos o tres pinceladas que considero importantes. Más como en épocas como en las actuales en las que toda la gente joven, y menos joven, quiere ser funcionario. No hay nada peyorativo en ello.

Hay un poema del autor Robert Frost http://es.wikipedia.org/wiki/Robert_Frost, que marca un poco la pauta del sentido de este libro. Y viene a terminar así: "...Dos caminos se bifurcaban en un bosque, y yo, yo tomé el menos transitado, y eso ha hecho la diferencia".

La vedad es que la inmensa mayoría tomamos un mismo camino, soy crítico conmigo mismo y me incluyo en el saco aunque con cierta frecuencia lucho porque no sea así. Y lo cierto es que tomando el mismo camino que el resto uno, con suerte, llega al mismo lugar donde otros ya llegaron. Creo recordar que hay una frase celébre de un expresidente norteamericano que dice algo parecido.

Un chico o chica joven, termina sus estudios, comienza a buscar trabajo, inicialmente de poca cualificación, baja remuneración y temporal y a medida que adquiere "experiencia" y va cambiando de distintas empresas, consigue ser mileurista o mildoscientoseurista y decide estabilizarse en dicho puesto, empresa. Quizás, antes de serlo se haya cansado y pensado en ser funcionario.

En muchos casos, ser funcionario es el escape a no tener la motivación suficiente para encontrar un trabajo que realmente te llene. En buena medida lo entiendo, y lo sufro, ya que a la inmensa mayoria se nos presentan dos opciones, trabajar en la empresa privada o ser funcionario. Y claro, entre hacer algo que no te llega a gustar, quizás cobrar algo más o menos y tener riesgos a quedarte sin trabajo frente a lo mismo, o muy parecido pero con la seguridad de que es un trabajo para toda la vida, es justo y correcto decir, Quiero ser Funcionario.

Lamentablemente, considero que ser funcionario supone en la inmensa mayoría de los casos olvidarse de los sueños que uno tuvo en su infancia. Porque todos tendremos que reconocer que pocos a edades tempranas y no tan tempranas deciden ser funcionarios. Bomberos, médicos, periodistas, futbolistas si pero no funcionarios.

Padre Rico Padre Pobre habla de dos visiones, la del padre tradicional que quiere que su hijo estudie y encuentre un trabajo por cuenta ajena estable y la del padre rico que quiere que adquira experiencias, que aprenda, que arriesge.

Estoy completamente seguro que en las sociedades modernas la inmensa mayoría de las personas consiguen en cierta medida lo que se proponen. El que se propone tener un trabajo normal, estable y tranquilo, vivir en un piso de 80m2, casarse y tener hijos, lo termina teniendo o se queda cerca de ello. Hay una frase fantástica que dice algo así como, hay que tener cuidado con lo que se desea porque termina por cumplirse o en la vida se cumple todo, hasta lo que uno desea. Vamos que el que en el fondo aspira a una vida normal y convencional terminará teniendo esa vida.

El libro dice muchas cosas que no me llegan pero en cambio hay otras demasiado ciertas. Una de ellas es que el dinero como tal no existe y no es más que un invento del hombre, como la inmesa mayoria de nuestros calvarios cotidianos.(Si no lo dice este libro, lo dice uno de Aitor Zarate, supongo que Cambia de Vida, el único que leí). Aunque no lo diga este libro, yo llego a dicha conclusión, para el caso es parecido.

Al final uno piensa que el dinero es a la zanahoria lo que el hombre es al burro. Si a eso le añadimos el "camino de las ratas", la probabilidad de que uno cumpla sus sueños se diluye. El camino de las ratas según el libro es algo así como tanto tengo tanto gasto. Tengo cien, me gasto cien. Si me someto un pelín más me das algo más, también me lo gasto.

Ayer por la mañana, como tantisimas otras mañanas, me encontré alguien de una empresa competencia a la mia y su única preocupación, o una de sus preocupaciones más importantes, era seguir recibiendo la nómina a final de mes. Es natural que sea una preocupación pero también es lamentable. Especialmente lamentable cuando uno vive al día y necesita llegar a final de mes y ver unos números de más en su cuenta para poder seguir al mismo ritmo. Uno adquiere el ritmo de gastarse todo lo que gana a mes vencido, o antes, y obligatoriamente tiene que estar pensando en la fecha en la cual tiene un nuevo ingreso de nómina para poder tener garantías reales de continuidad.

Claro, uno puede pensar que si ganara dos o tres veces más, o simplemente un 20% más, tendría dinero para ahorrar. La realidad luego no es esa, o es esa a medias. Estoy seguro que el que gana 100 y ahorra 5 si mañana le pagan 150 no ahorrará 55. Seguro.

Padre Rico Padre Pobre habla precisamente de eso, si ganas 100 y ahorras 5, cuando genes 150 sigue ahorrando los 5 más los 50 nuevos. De lo contrario, cuando estes en 150 creeras necesitar 200.

Muchas veces creo que unos listos crearon el dinero, unos listos que se rien de nosotros. Unos listos que nos roban nuestra ilusión, sueños, tiempo. La realidad luego es la que uno decida tomar, vamos que existen al menos dos caminos, el de la zanahoria y el de intentar generar uno sus propios ingresos. Claro, uno puede pensar que ¿cómo voy a crear mis propios ingresos? montar una empresa, invertir el dinero con criterio,... es tan difícil, tan complicado que ¿cómo lo voy a hacer?. Corro el riesgo de perderlo todo y estar peor que al principio.

Es cierto, generalmente montar un negocio y que sea exitoso es complicado, invertir en bolsa, en activos inmobiliarios y tener de forma constante unos ingresos también es difícil. Además, si uno solo puede acumular unos ahorros de pongamos de 10.000 ó 20.000 euros, ¿qué puede hacer para que eso en unos años le genere la independencia financiera?. ¿No será mejor irse de viaje y vivir el momento? o ¿comprarse el coche que necesito pero de gama superior?. Quizás así palie un poco la ansiedad que a veces genera el trabajar en lo que no me gusta.

Luego también esta la visión de trabajo para vivir o vivo para trabajar. Creo que es un tremendo error, pensar que es una u otra cosa. Cuando trabajas un mínimo de 40 horas semanales y tu familia depende de tus ingresos, carece de sentido plantearse eso.

El jueves por la noche, un cliente en una conversación dijo que a su hijo le habían puesto como nota un "éxito aplazado". Me fascinó. No dije nada, estaba pendiente de mi trabajo y no de mis inquietudes, pero me fascinó enormemente. Esto va un poco al hilo de otro tema del libro y es el que defiende que uno salga a la calle y haga cosas, al menos así lo entendí, que conozca, adquiera experiencias y que tenga éxito o fracaso y si es a lo grande mejor. Vengo a entende algo así como no importa si hoy te equivocas, si mañana también te equivocas y pierdes tiempo y dinero. De alguna forma, si uno sigue, puede no ser más que un Éxito Aplazado.

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